Deprecated: Creation of dynamic property WDS::$front_url is deprecated in /home2/ppcteoti/public_html/wp-content/plugins/slider-wd/slider-wd.php on line 113

Deprecated: Creation of dynamic property WDS::$site_url_placeholder is deprecated in /home2/ppcteoti/public_html/wp-content/plugins/slider-wd/slider-wd.php on line 89

Deprecated: Creation of dynamic property WDS::$site_url_buttons_placeholder is deprecated in /home2/ppcteoti/public_html/wp-content/plugins/slider-wd/slider-wd.php on line 90

Warning: Constant automattic\jetpack\extensions\social_previews\FEATURE_NAME already defined in /home2/ppcteoti/public_html/wp-content/plugins/jetpack/extensions/blocks/social-previews/social-previews.php on line 14
Blog Archives - Página 4 de 6 - Complejo Plaza de las Columnas

Navegando por
Categoría: Blog

LiDAR

LiDAR

La tecnología LiDAR (detección y clasificación de imágenes por láser) emplea un dispositivo que permite detectar la superficie de diferentes tipos de objetos; esto lo hace mediante la emisión de un láser que mide y registra la distancia entre el aparato emisor y el objeto que refleja la emisión. El dispositivo funciona como un escáner aerotransportado, que dispara miles de emisiones láser por segundo y registra sus “retornos” al aparato; con esta información se obtienen miles de ubicaciones que forman una “nube de puntos”, que además están referenciados geográficamente.

Calzada de los Muertos y Pirámide de la Luna: nube de puntos LiDAR.

Esta información permite generar una imagen de los diversos objetos que cubren la superficie del terreno como la vegetación y estructuras modernas, y también de las secciones no cubiertas. Una de las grandes ventajas de esta técnica es que el procesamiento de los datos permite “eliminar” (virtualmente) la vegetación que cubre el terreno y así poder obtener un “retrato” detallado de la superficie del terreno, que se le conoce como Modelo Digital del Elevación (DEM). El grado de detalle que tienen estos tipos de mapas e imágenes digitales es mucho mayor al que se podría obtener por medios tradicionales de topografía, además de que ahorran mucho tiempo y fuerza de trabajo. No obstante, aún no es una técnica accesible para su aplicación generalizada.

Pirámide del Sol: fotorafía aérea (izquierda) fusionada con imagen del DEM (derecha).

Recientemente esta técnica se ha aplicado en el ámbito de la arqueología, donde está complementado los métodos tradicionales de reconocimiento que eran la fotografía aérea y los recorridos a pie. Además, como los datos están referenciados al Sistema de Posicionamiento Global (GPS), la información recolectada está georreferenciada, además de que tiene una gran resolución, por lo que el grado de error es de apenas centímetros en el registro de los rasgos o elementos detectados en el mapa LiDAR.

Para el caso particular del Valle de Teotihuacan, el Proyecto Complejo Plaza de las Columnas generó un mapa con LiDAR en 2015. Este mapa cubre un área de 165 Km2 aproximadamente, y aunque la vegetación no es un elemento “que nublara la vista” sobre la superficie del área investigada, lo que permitió su procesamiento fue eliminar las estructuras modernas (manchas urbanas) que dominan el valle. Este mapa LiDAR es único en la región, y presenta un retrato del valle en 2015, sobre el cual podrán registrarse y compararse los cambios que ha sufrido su superficie a través de los siglos.

Mapa LiDAR sobre fotografía aérea del Valle de Teotihuacan (© PPC, Informe Temporada 2018).

Como parte del mismo proyecto en 2017 se designó a un equipo especial para iniciar el trabajo de prospección en superficie; su objetivo ha sido recorrer el Valle de Teotihuacan, para buscar y verificar cada uno de los detalles registrados en el mapa LiDAR de 2015. Este equipo se ha concentrado en realizar recorridos a pie a lo largo y ancho del valle, tomando muestras de los materiales visibles en la superficie y verificar la exactitud y veracidad de lo observado a detalle en el mapa LiDAR, es decir, distinguir entre los posibles elementos antiguos y otros que son modernos. Para esto ha sido indispensable establecer contacto con diferentes comunidades locales.

Este trabajo de recorrido de superficie empieza desde el laboratorio. Primero, parte del equipo se encarga de analizar el mapa para detectar posibles rasgos antiguos, que los nombra “elementos potenciales”, y pueden ser montículos, depresiones, terrazas, plazas o estructuras. Después, la otra parte del equipo se encarga de verificar en el campo esos elementos potenciales, y lo hace caminando exactamente en el área marcada por el primer equipo con la ayuda de dispositivos de posicionamiento geográfico (GPS); por eso es tan importante conocer las coordenadas geográficas de forma precisa.

Una vez detectado el terreno que contiene el elemento a investigar, el equipo de recorrido procede a tomar muestras de los materiales que se observan en superficie. Para esto, se delimita un área específica, donde se recolectan fragmentos de cerámica, obsidiana, figurillas de barro y piedras pulidas como metates y manos. Posteriormente, se realiza un registro detallado del elemento revisado, haciendo anotaciones sobre la vegetación presente, el uso de suelo actual y la presencia de otros materiales. Todo lo que se recolecta como muestra es etiquetado y se lleva al laboratorio, donde posteriormente será lavado, marcado y finalmente analizado por nuestros especialistas en cerámica y lítica.

Valle de Teotihuacan: recolección de materiales culturales.

Este tipo de trabajo realizado en el Valle de Teotihuacan no sería posible sin el apoyo de las comunidades locales, pues son las que nos han permitido caminar sobre sus parcelas, terrenos agrícolas, ejidos y otras propiedades; todos unidos en un mismo esfuerzo por conservar y estudiar su herencia cultural. Cabe mencionar que además de los permisos para realizar la prospección, los pobladores también nos transmiten conocimientos sobre sus terrenos, ya sean historias sobre los cambios pasados y recientes, o bien, los nombres antiguos de algunos lugares (como los distintos cerros que rodean al valle). Eso sin duda, enriquece aún más la información que puede obtenerse del mapa digital en sí mismo.

Así, agradecemos a las siguientes comunidades y sus pobladores por su incondicional apoyo en estos esfuerzos:

  • Atlatongo (Palomar)
  • Barrio de Purificación
  • Belén
  • Cozotlán
  • Cuautlazingo
  • El Saltito
  • Ixtlahuaca
  • Maquixco
  • Oxtotipac
  • San Agustín Actipac
  • San Antonio de las Palmas
  • San Francisco Mazapa
  • San Isidro
  • San Lorenzo Tlalmimilolpan
  • San Lucas Tepango
  • San Pedro Tepetitlán
  • San Sebastián Xolalpan
  • Santa María Palapa
  • Santiago Tolman
  • Santiago Tepetitlán
  • Tlachinolpa
  • Tlajinga
  • Xometla

De igual forma, agradecemos a los municipios de Acolman, San Martín de las Pirámides, Teotihuacan de Arista, y Otumba, así como al Centro de Conservación Reino Animal, y a la Delegación Texcoco de la Secretaría del Medio Ambiente del Estado de México, por la atención prestada, así como la facilidad en los permisos requeridos para poder realizar este proyecto de investigación.

Los elementos de la dieta antigua: cómo el análisis de isótopos en el laboratorio ayuda a los arqueólogos

Los elementos de la dieta antigua: cómo el análisis de isótopos en el laboratorio ayuda a los arqueólogos

por Esther Aguayo

La comida es una parte muy importante de nuestras vidas, pero es un aspecto difícil de reconocer en el registro arqueológico. Por lo general, los arqueólogos tratan de encontrar huesos de animales y otros residuos en antiguos depósitos de basura o  vasijas, para averiguar lo que la gente pudo haber comido. Sin embargo, actualmente hay una herramienta que los arqueólogos pueden utilizar y que puede decir mucho sobre lo que las personas y los animales consumieron: los análisis de isótopos estables. Esta metodología permite conocer la composición química de huesos humanos y de animales, por lo que puede revelar valiosa información sobre la dieta y en consecuencia, los arqueólogos pueden proyectar ideas sobre la organización social y la interacción entre los seres humanos y los animales.

Todos los organismos vivos están compuestos de moléculas que han comido y en consecuencia han absorbido durante toda su vida. Los huesos, los dientes, y hasta las moléculas del cabello pueden decir mucho sobre la historia de vida y el medio ambiente de un organismo. Estas moléculas contienen elementos que se denominan isótopos estables, y su composición puede variar dependiendo del entorno en el que ha vivido del organismo. Ciertos factores como la temperatura, la altitud, la nutrición y la humedad afectan dicha composición isotópica y se verá reflejado en los tejidos que analizamos. Los isótopos que se pueden analizar son los de carbono, oxígeno, nitrógeno y estroncio.  El carbono se encuentra en el grafito de nuestros lápices y en el aire que respiramos y luego expiramos como dióxido de carbono; también, el carbono se relaciona con el mecanismo en que las plantas obtienen energía, es decir, la fotosíntesis. Los ciclos de los isótopos del carbono C3 y C4 son las vías fotosintéticas más comunes que una planta utiliza, y sus proporciones varían de una especie de planta a otra. Como estos isótopos pueden ser determinados en los huesos de un animal o una persona que haya comido plantas, los arqueólogos pueden reconstruir cuáles plantas comieron, dónde vivían (basándose en los lugares donde crecen/crecían dichas plantas), y cómo su dieta pudo cambiar a través del tiempo…¡Esta es la información que se puede deducir “sólo” del carbono! He ahí la importancia de recopilar la información que proporcionan los análisis de isótopos estables.

This image has an empty alt attribute; its file name is PIC2-1-1024x553.jpg
Fragmento de hueso de ciervo arqueológico con sección removida para el análisis de isótopos.

¿Cómo realizan los arqueólogos análisis de isótopos? En mi caso, en el Laboratorio de Ciencias Arqueológicas de la Universidad George Mason ayudo a preparar los huesos para poder extraer la información isotópica requerida, como en el caso de los huesos arqueológicos recuperados en las investigaciones del Proyecto Complejo Plaza De Las Columnas (PPCC). Primero se limpian los huesos después de la excavación. Después se separan de acuerdo a especies identificadas, se fotografían y se documentan bien para tener un mejor registro; es muy importante esta documentación porque el análisis de isótopos es un proceso destructivo. Una vez que los huesos están limpios, me aseguro de quitar todo resto de tierra adherida alrededor y dentro del hueso, empleando una herramienta rotatoria, con la cual también se extrae la muestra del hueso que será utilizada en el análisis isotópico. A continuación, “lavo” esa muestra en un baño sónico, el cual elimina el resto de la suciedad, que no pudo retirarse a mano, mediante ondas sonoras de alta frecuencia.

This image has an empty alt attribute; its file name is PIC3-1-1024x631.jpg
Muestras de isótopos listas para ser remojadas durante la noche.

Después de dejar secar la muestra durante una noche, la trituro con un mortero y pistilo de ágata hasta convertirla en un polvo fino. Luego la peso y la transfiero a un tubo para que pueda remojarse durante la siguiente noche en una solución química que eliminará la mayoría de sus componentes orgánicos. Posteriormente, enjuago la muestra con agua ultrapura y mediante una solución ácida, elimino por completo los compuestos orgánicos restantes. Finalmente, la vuelvo a pesar y entonces, la muestra está lista para llevarla al espectrómetro de masas del Smithsonian Museum Conservation Institute.Este equipo es capaz de medir las variaciones isotópicas de la muestra, y estas variaciones son las que proveerán la información para que los arqueólogos reconstruyan la dieta del individuo y el ecosistema en el que vivía.

This image has an empty alt attribute; its file name is PIC4-1-1024x768.jpg
Adición de la solución química para eliminar el material orgánico del polvo óseo.

A primera vista, el análisis de isótopos puede resultar intimidante para alguien con poca experiencia trabajando con productos químicos y robustos equipos de medición. Sin embargo, he disfrutado enormemente mi tiempo trabajando en el Laboratorio de Ciencias Arqueológicas aprendiendo sobre los isótopos y cómo muchas preguntas sobre la vida antigua pueden ser contestadas a través de estudios como este. Los análisis de isótopos estables abren una nueva ventana a la vida antigua que puede brindar información a los arqueólogos para inferir más allá del propio consumo de alimentos. En el PPCC, el análisis de isótopos ha permitido a sus investigadores encontrar información valiosa sobre el manejo de fauna y cómo esto incidió en la estructura social en la antigua ciudad de Teotihuacan. Así, el potencial de los análisis isotópicos es bastante amplio, y los arqueólogos tienen aún mucho que descubrir aplicando esta fascinante metodología en sus investigaciones.

Referencias:

  1. France, Christine A.M., Douglas W. Owsley, and Lee-Ann C. Hayek. “Stable Isotope Indicators of Provenance and Demographics in 18th and 19th Century North Americans.” Journal of Archaeological Science 42 (2014).
  2. Schwarcz, H.P, M.J. Schoeninger. “Stable Isotopes of Carbon and Nitrogen as Tracers for Paleo-diet Reconstruction.” In Handbook of Environmental Isotope Geochemistry, by M. Bakaran, 725-742.
  3. Sugiyama, Nawa, William L. Fash, and Christine A. M. France. “Jaguar and Puma Captivity and Trade among the Maya: Stable Isotope Data from Copan, Honduras.” Plos One 13, no. 9 (2018) .
  4. White, Christine D. “Stable Isotope and the Human-Animal Interface in Maya Biosocial and Environmental Systems.” Archaeofauna 13 (2004). 183-198.
¿Qué información se puede obtener de los tepalcates?

¿Qué información se puede obtener de los tepalcates?

Ollas, jarros, cazuelas, vasos, etc., son algunos ejemplos de la increíble variedad de tipos de cerámica encontrados en Teotihuacan. Estos artefactos son reservorios de una impresionante cantidad de información, de tal manera que los arqueólogos pueden extraerla a través de una paciente reconstrucción de los datos. Además de utilizar la cerámica para establecer la cronología relativa, esta es empleada para obtener otro tipo de información, a continuación, se presentan otras aplicaciones

Evolución de la tipología: el cambio de estilos cerámicos entre los materiales recuperados a través del tiempo nos da una idea de cuáles fueron las tendencias en Teotihuacan en cada fase y la tasa de estos cambios. Dicha evolución de los tipos de alfarería que pueden ser registrados según el tipo de diseños, decoraciones, métodos o tipo de materiales usados para fabricar sus cerámicas a través de la historia.

En la siguiente imagen se puede observar la forma en que fueron cambiando las cerámicas en Teotihuacan. Por ejemplo, observa y compara el fragmento más sencillo de cerámica de la Fase Tzacualli con el de la Fase Metepec. El tepalcate de la Fase Metepec que se muestra en la imagen presenta un diseño más elaborado, y fue decorado con estuco pintado.

78_fc_sp
Cerámica proveniente de diferentes fases. Fuente: Elaboración propia, imágenes de tepalcates modificados de Rattray (2000a, b)

Información de contexto: la distribución, frecuencia y el tipo de cerámica en diferentes sitios puede ser de ayuda para reconstruir el tipo de actividades desarrolladas en un sitio específico. Por ejemplo, una alta densidad de cerámica utilitaria tal como vasos, platos, jarras pueden ser un indicador de una cocina antiguas. Por otro lado, conjuntos grandes de piezas cerámicas defectuosas o inconclusas, podrían indicar la presencia de talleres de fabricación de cerámica.

Los entierros también contienen materiales cerámicos. Usualmente, dentro de estos contextos funerarios se han recuperado piezas cerámicas poco usadas y con diseños muy sofisticados, entre ellos algunos incensarios, miniaturas, y jarras Tláloc.

Comercio: es evidente que algunos tepalcates fueron importados de otras regiones fuera del Valle de Teotihuacan. Es posible identificar objetos foráneos mediante el rastreo del origen de las materias primas con los que fueron hechas (arcillas, pinturas, entre otros), así como por las técnicas decorativas y de manufactura distintivas.  por las técnicas decorativas. Dichos datos acerca de la calidad y ubicación de estas cerámicas importadas han proporcionado información de las relaciones que los antiguos teotihuacanos tenían con otros grupos inmigrantes de toda Mesoamérica, así como con asentamientos enclave.

Por ejemplo, los arqueólogos han identificado grandes cantidades de cerámica anaranjada y granular, la cual indica que inmigrantes foráneos vivieron en Teotihuacan. Estas y otras cerámicas importadas fueron importadas desde el Golfo de México, del oeste de México, de Oaxaca y de la región Maya, entre otros, lo cual indica que Teotihuacan fue una ciudad metropolitana constituida por inmigrantes provenientes de diversas regiones de Mesoamérica.


Literatura consultada

Rattray, Evelyn Childs. 2000a. Teotihuacan: Ceramics, Chronology and Cultural Trends. University of Pittsburgh Memoirs in Latin American Archaeology, No. 13.

Rattray, Evelyn Childs. 2000b. Teotihuacan: Ceramics, Chronology and Cultural Trends–Color Illustrations. Latin American Archaeology Database, University of Pittsburgh. <URL: http://www.pitt.edu/~laad/rattray/>

Rattray, E. C. 2001. Teotihuacan: Cerámica, cronología y tendencias culturales /  Ceramics, chronology and cultural trends. Serie Arqueología de Mexico, Instituto Nacional de Antropología e Historia / University of Pittsburg. Mexico, D. F., 617 pp. + Tablas de frecuencias de los grupos cerámicos / Tables of frequencies of ceramic wares.

¿Qué se puede saber con el análisis de la cerámica?

¿Qué se puede saber con el análisis de la cerámica?

El caso de los candeleros

por Yolanda Peláez Castellanos

Los alfareros que elaboraron las piezas cerámicas que se recuperan en las excavaciones arqueológicas les dieron distintas formas dependiendo de la función que éstas tendrían (e.g. las ollas y cajetes se usaban en la preparación y consumo de alimentos). Una forma muy particular que corresponde casi exclusivamente a Teotihuacan (cuando se han encontrado en sitios foráneos se atribuye a presencia teotihuacana) es esta:

Candeleros de distintas fases (fotografía Fredy Álvarez)

Estas vasijas son pequeñas y pueden tener una (4x5x4cm) o dos (5x8x5cm) cámaras cilíndricas y los dobles suelen tener perforaciones laterales. En la Colonia recibieron el nombre de “candeleros” porque los indígenas los reutilizaron para soportar velas (Ceballos 1992:205-206), pero éstas no existían cuando la ciudad de Teotihuacan estaba habitada.

El análisis de los candeleros nos aporta información acerca de ellas (Peláez 2018):

PRODUCCIÓN

Al examinar las piezas, se puede apreciar la técnica que se usó para decorarlas (e.g., punzonado, incisión, impresiones de dedo).

Se invirtió más tiempo en la producción de algunas piezas (e.g., es más tardado fabricar un candelero con el labio pulido como los de la fase Xolalpan que uno con impresiones de dedo como los de la fase Metepec).

La manera de elaborarlos y decorarlos cambió con el tiempo, por sus características físicas se clasificaron en tres fases tomando en cuenta los parámetros de una cronología preestablecida (Rattray 2001), que señala que la producción de los candeleros duró un periodo de aproximadamente 400 años (250-650 d.C.). (Ver Análisis Cerámico, Cronología Relativa)

USO

Algunos rasgos observables dan indicios sobre el empleo de los candeleros:

  • Las huellas obscuras en las cámaras indican que se quemó algo dentro de ellas.
  • Se encontraron restos orgánicos carbonizados dentro de las cámaras de algunos de ellos.  
Candeleros con huellas de quemado (Fotografías Fredy Álvarez, Yolanda Peláez)

Para investigar sobre las sustancias que podrían haber contenido estos artefactos, se analizaron sus residuos químicos. Éstos se almacenan en los poros de la superficie donde se derramaron sustancias líquidas o semilíquidas, si esta acción fue repetida o si se depositó una gran cantidad de materia, se pueden identificar algunos componentes presentes en dichas soluciones (i.e., fosfatos, carbonatos, proteínas, ácidos grasos, carbohidratos y también se puede medir el pH) por medio de pruebas llamadas spot-tests (Barba et al. 2008: 721; Barba et al. 2014:202-204). Esta metodología también se utiliza para el análisis de química de suelos (Barba et al. 1991).

No todos los candeleros estuvieron enriquecidos, pero la combinación de componentes que se identificaron se interpretó como: combustión moderada de celulosa, presencia de sustancias de origen animal y combustión de resinas (Peláez 2018). Esto es consistente con los resultados de otras investigaciones (Ortiz 2006).

DEPOSICIÓN

La ubicación donde se encuentran los materiales hallados en excavaciones a veces corresponde con el lugar donde éstos fueron desechados, que no necesariamente es dónde se usaron, aunque es factible que se hayan utilizado en la cercanía y en varias localidades de Teotihuacan, los candeleros se han hallado asociados a espacios domésticos.

La mayor parte de los candeleros estudiados del PPC (77%) provino del Frente C, inicialmente se hipotetizaba que esta área era de carácter doméstico, aunque hasta ahora sólo se han encontrado cuartos al oeste del Montículo 25Z y al norte de la Estructura 26A, la presencia de candeleros apoya la idea de que esta zona podría haber sido residencial.

Unidades de excavación con presencia de candeleros y porcentaje de la muestra presente en cada frente (Datos del mapa ©PPC, elaboró Yolanda Peláez)

Referencias

Barba, Luis, Roberto Rodríguez, y José Luis Córdova

1991      Manual de técnicas microquímicas de campo para la arqueología. Instituto de Investigaciones Antropológicas, Universidad Nacional Autónoma de México, México, D.F.

Barba, Luis

2008       Los residuos químicos en cerámica. Indicadores arqueológicos para entender el procesamiento de alimentos y el uso de recipientes. En Quaderni di Thule VIII. Atti del XXX Convegno Internazionale di Americanistica, pp. 721-728. Centro Studi Americanistici Circolo Amerindiano, Perugia.

Barba Luis, Agustín Ortiz y Alessandra Pecci

2014       Los residuos químicos. Indicadores arqueológicos para entender la producción, preparación, consumo y almacenamiento de alimentos en Mesoamérica. Anales de Antropología 48(1):201-239.

Ceballos Novelo, Roque

1922      Candeleros. En La población del valle de Teotihuacan, Vol. 1, editado por Manuel Gamio, pp. 205-212. Secretaría de Agricultura y Fomento, Dirección de Antropología, México, D.F.

Rattray, Evelyn

2001      Teotihuacan: cerámica, cronología y tendencias culturales. Instituto Nacional de Antropología e Historia y University of Pittsburgh, México D.F.

Ortiz, Nidia

2006      El candelero: estudio comparativo sobre su función en Teotihuacan durante el Clásico, Epiclásico y Posclásico Temprano. Tesis inédita de licenciatura en Arqueología, Escuela Nacional de Antropología e Historia, México, D.F.

Peláez Castellanos, Yolanda

2018       Los candeleros del Complejo Plaza de las Columnas, Teotihuacan. Tesis inédita de licenciatura en Arqueología, Universidad de las Américas, Puebla, Cholula, Puebla.

Social media & sharing icons powered by UltimatelySocial